A la hora de producir el bordado, la densidad de puntada presente puede no ser la idónea para ciertos hilos o telas. También es posible que desee abaratar la producción reduciendo el número total de puntadas. Tras las operaciones de graduación de escala, por ejemplo, los diseños pueden contener puntadas pequeñas que pueden dañar la tela y causar la rotura del hilo o la aguja. Las esquinas cerradas pueden provocar el amontonamiento de puntadas, lo cual puede crear puntos duros en el bordado y dañar la tela o la aguja.
Las máquinas de bordado tienen una máxima longitud de puntada posible que viene determinada por el movimiento del bastidor. Si las puntadas satín largas exceden esta longitud, se rompen en puntadas más pequeñas.
EmbroideryStudio ayuda a resolver estas cuestiones con varias técnicas especializadas para optimizar la calidad del bordado para diferentes clases de diseño y diferentes requisitos de producción.